El mercurio es el único metal que se encuentra en estado líquido a temperatura ambiente. Tiene su origen en las entrañas mismas de la tierra emanando como producto de desgasificación a lo largo de fallas profundas; el mercurio inicia un ciclo geoquímico pasando del magma a la corteza terrestre y, de esta, al aire, el agua y los suelos, para pasar luego a las plantas y a los animales y, por último, al hombre.
Es decir que, el mayor contribuyente a que el mercurio circule en el medio ambiente es la naturaleza misma. Sin embargo, en las últimas décadas los niveles de mercurio en el medio ambiente han aumentado considerablemente desde su utilización en la minería a pequeña escala para separar el oro de la roca, convirtiéndose en la principal fuente de emisiones de este en el mundo.
El mercurio en la extracción artesanal del oro
La minería pequeña o artesanal se lleva a cabo en países en desarrollo y produce entre el 20% y el 30% anual del oro del mundo con unas 700 toneladas aproximadamente y es la fuente de subsistencia de una 100 millones de personas directa o indirectamente.
En esta forma de minería se utiliza el mercurio como principal medio para separar y extraer el oro de las rocas o piedras en las que se encuentra. El mercurio se adhiere al oro formando una amalgama que facilita su separación de la roca, arena o el material al que este adherido. Luego se calienta la amalgama para que se evapore el mercurio y quede el oro.
En el siguiente video podrás ver cómo reacciona el oro al entrar en contacto con el mercurio.
Quemado de la amalgama
En esta etapa del proceso, la amalgama se coloca en una pala o cazo de metal y se quema directamente sobre el fuego. El mercurio se convierte en vapor y de esta manera se obtiene un oro poroso que se conoce como “esponja de oro”. Luego esa esponja se funde para producir oro doré que, tras ser refinado se convierte en oro 24k.
Utilización de retortas para separar el oro del mercurio
Cuando los mineros queman la amalgama, el mercurio que se evapora es inhalado por el minero y todas las personas cercanas, generando serios problemas de salud. Para evitar esto, es necesario el uso de retortas.
Una retorta es un cuenco o recipiente que se coloca invertido sobre la amalgama mientras esta se quema. De esta manera el vapor de mercurio queda atrapado y se condensa. Con este sencillo implemento se evita que se libere en la atmósfera, disminuyendo los riesgos para la salud de los mineros, sus familias y sus comunidades.
Las retortas constituyen una tecnología sencilla que permite recuperar gran parte del mercurio evaporado de la amalgama. Pueden fabricarse de acero inoxidable o acero galvanizado y permiten que más del 95% del mercurio pueda reciclarse y reutilizarse, lo que conlleva también un ahorro en los costos de producción.
Alternativas al uso del mercurio en la extracción de oro
El uso del mercurio en la minería artesanal está ampliamente extendido, sin embargo el impacto ambiental y los riesgos en la salud que ocasionan su uso han generado un movimiento a nivel mundial que lucha por erradicarlo y en su lugar utilizar otros métodos o productos menos contaminantes.
Uno de ellos es el borax, que al ser una sustancia de baja peligrosidad para la salud humana, bajo impacto ambiental en general, de fácil disponibilidad y además de bajo costo, resulta una excelente alternativa.
El borax, también conocido como sal de boro es un cristal blanco y suave que se diluye fácilmente en el agua y es un efectivo agente limpiador. En el caso de la minería de oro, ha demostrado que al ser fusionado con los concentrados minerales auríferos resulta más efectiva que el proceso de amalgamación recuperando mayor cantidad de oro y en menos tiempo.
Otra alternativa es la flotación espumante, un proceso mediante el cual se utilizan reactivos químicos para separar los minerales y en el cual se genera una espuma donde se concentra el oro. Este método asegura una recuperación del oro del 100%, derribando el mito de la efectividad del mercurio.