El oro es uno de los metales preciosos más valorados y codiciados del mundo. Desde la antigüedad, las personas buscan portar y lucir el oro como una muestra de estatus en forma de adornos y joyas. Su color dorado es su principal característica y mantenerlo brilloso y reluciente es fundamental para que se pueda apreciar en todo su esplendor.
Si bien el oro es un material que no se oxida, con el paso del tiempo puede ennegrecerse u opacarse debido al contacto constante con la grasitud de la piel, el uso de lociones, perfumes maquillajes o simplemente el polvo y la suciedad a la que nos vemos expuestos cotidianamente.
Es por ello que es importante saber cómo limpiarlo correctamente y sin dañarlo. Por suerte el oro es un material de fácil mantenimiento, aunque debes saber que existen diferentes métodos de limpieza y según el tipo de oro algunos son más eficientes que otros. Pero descuida que aquí te contaremos todo lo que necesitas saber.
¿Con que se limpia el oro cuando se pone negro?
Para limpiar oro ennegrecido lo recomendable es mezclar jabón de lavavajillas y agua con gas o agua caliente en un recipiente pequeño. Luego se debe introducir la pieza de oro dentro del recipiente durante unos diez a veinte minutos. Esto permitirá que la pátina negra se vaya aflojando.
Tras retirar la joya del agua se debe frotar con un cepillo de cerdas suaves para evitar rayar y dañar la pieza. Se puede agregar un poco de pasta de dientes para darle mayor efectividad a la limpieza. Al finalizar se debe enjuagar con agua tibia y secarse con un paño de microfibra.
Métodos de limpieza de acuerdo al tipo de oro
Como mencionamos anteriormente, cada tipo de oro requiere un método de limpieza diferente y a continuación vamos a contarte como cuidar tus joyas según su color.
Oro Amarillo
El oro amarillo no es otro que el oro clásico dorado que todos conocemos y es el más usado en joyería. Normalmente lo encontramos en calidad 18 quilates o 24 que es su máxima pureza. Por lo general el oro de esta calidad no suele ennegrecerse aunque puede ensuciarse y opacarse en su uso cotidiano.
Para limpiar este tipo de oro es fundamental utilizar siempre agua caliente para proteger mejor la pieza y frotarla con un cepillo de dientes de cerdas suaves. Puedes utilizar productos desengrasantes como el bicarbonato o el vinagre o incluso el amoniaco.
A la hora del secado se recomiendan paños suaves de microfibra que no dañen la pieza de lo contrario habrá que recurrir a la joyería para que recupere su brillo original mediante un tratamiento de pulido.
Oro Blanco
El oro blanco es el resultado de la combinación del oro con otros materiales como la plata, el paladio, el níquel o el platino. Este tipo de joyas suele perder su brillo característico con el paso del tiempo por eso se recomienda limpiarlo con agua caliente, desengrasante y amoniaco para luego frotar con un cepillo de dientes de cerdas suaves.
No obstante, por sus características, la manera más efectiva de que mantenga su brillo es aplicarle un tratamiento de galvanizado de rodio que garantiza un brillo permanente resistente al desgaste. Un trabajo que se hace en las joyerías y que protege a la pieza y le devuelve su aspecto reluciente.
Oro Rosa
Aunque es bastante conocido, también es el menos popular. El oro rosa es una aleación de oro de 24k con plata y cobre. Y al igual que el oro amarillo, puede ser limpiado con agua caliente mezclada con amoniaco, desengrasante o bien vinagre y luego frotado con un cepillo suave.
Es importante destacar que, con el tiempo el oro rosa desarrolla un color más intenso debido al cobre, lo cual lo vuelve más valioso pero también más delicado ya que debes tener ciertas precauciones para conservar su color y por ello no debes usar limpiadores químicos o exponerlo a máquinas ultrasónicas.
3 Trucos caseros para limpiar de forma sencilla el oro
Como hemos podido ver, no necesitas costosos productos especiales para limpiar tus joyas de oro y que recuperen su brillo. El agua, el jabón, los desengrasantes lavavajillas, el vinagre y el bicarbonato resultan altamente efectivos para lograr este cometido.
Estos 3 trucos garantizarán que tus joyas luzcan como recién compradas.
- El Agua; debe estar caliente pero no hirviendo ya que la alta temperatura puede dañar la integridad de la pieza de oro. El agua caliente ayuda a disolver la suciedad adherida. Solo debemos agregarle jabón, desengrasante y/o vinagre y dejar la pieza sumergida 15 minutos y dejar que la mezcla haga su trabajo.
- El cepillo para limpiar; el oro resulta tan delicado como el esmalte que cubre nuestros dientes y por eso nada mejor que un cepillo de dientes de cerdas suaves para limpiar nuestra pieza de oro y remover lo que haya quedado de suciedad sin temor a rayarlas. No obstante también puedes adquirir cepillos específicos para la limpieza de joyas.
- Bicarbonato; si prefieres este método para limpiar el oro solo debes colocar el oro en un recipiente, cubrirlo de bicarbonato y luego agregar agua caliente y dejar que la mezcla haga su trabajo durante 5 minutos y luego retirarla para terminar de limpiar con un cepillo o un paño de microfibra.
En el siguiente video podrás observar 5 métodos para limpiar tus joyas de oro con los trucos que te mencionamos anteriormente…